lunes, 14 de noviembre de 2011

Reflexión profunda


He notado que están pasando cosas raras. Tal vez sea que antes no me daba cuenta o que no se notaba, pero ahora sí.

La primera que mencionaré es la innegable aceleración del tiempo. ¿Que es subjetivo? ¿Que soy solo yo? No sé si tanto porque además de que lo he estado pecibiendo muy amenudo, también otros me lo han comentado, otras personas, otra gente...esta cuestión tiende entonces a envestirse de algún tipo de objetividad.

La sensación puede venir del hecho de que hay menos momentos de reflexión profunda, porque cuando estos se llevan a cabo, ya han pasados meses o años. Y uno entonces se dice: ¿Ya hace una año de esto? Pero...

¿Qué es esto de la feflexión profunda?

Los procesos de pensamiento, si bien tienen la misma contextura, no siempre son de la misma profundidad, del mismo alcance o la misma intensidad.

No es lo mismo pensar "qué día tendremos mañana" a buscar la respuesta de un "Cómo se originó la primera pregunta y cual fué?


Pero un ejemplo de reflexión profunda no tan difícil de encontrar en la experiencia propia y ajena es esta exótica toma de conciencia:

"Antes estaba allá, con aquellas personas y aquellos objetivos; hoy, sin darme cuenta de cómo ha sucedido, me veo acá, con estas personas y estas pasiones o metas".

Esta actitud reflexiva, cuando sucede a menudo, genera ecos muy esclarecedores, por ejemplo deja muy claro el dinamismo de la existencia y lo fluctuante y subjetivo del mundo sensorio.

Pero al mismo tiempo que parece fragmentar la identidad en distintos seres, en algunas etapas hasta contradictorios entre sí... en el seguimeinto de la evolución mental del sujeto, se hacen coherentes esos cambios y se comprende la fluctuante materia del universo perceptivo.

Otra cosa rara es que la gente está empezando a pensar.

La reflexión profunda es saludable en todos los sentidos.


Sigue siendo muy enriquecedora esta experiencia, a mi juicio, mística, chamánica, algo que nace y no se elige, como la vivencia de los "dejavús" y de otros saltos extraordinarios de la conciencia.

Reflexionemos más a menudo:

Miro alrededor, pienso en lo que estoy sin estar plenamente metido en el rollo, porque soy capaz de pensar y comparar la vehemencia del rollo anterior, o el de hace diez años...aunque existe una naturaleza empírica en la enseñanza, hay una capacidad de aprovechar la relectura que parece innata y hasta trascendente.


Aquí ahora y antes allí, antes pensando tal cosa y hoy tal otra, antes mirando tal serial, hoy contra la tv, o prescindiendo de ella, antes en una baile o en un pub, hoy junto al rio o en mi dulce hogar, produciendo la cultura que es la vida misma.

¿Quiénes están compartiendo la cercanía de mi tiempo? Las personas que ahora son protagonistas de tu vida pueden haber variado, se incoporan nuevos seres, que no hacen sino repetir una relación que ya se ha fundado, en otras o en un modelo de conciencia que genera sus vínculos y recursos porque están ya implíctos en su semilla, en su esencia.

Pero el paisaje y la multiplicidad arrolladora, a veces se colapasa al comprenderse en uno, la saberse uno, en el ninguno, más allá de todos, reevocamos o evocamos por enésima vez la conciecia de ser sobre todo Amor, conciencia y consecuencia...

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